Nos cuesta.

“Nos cuesta tanto trabajo dejar de ser lo que somos para convertirnos en lo que podemos ser.”

Cuando recibimos a Cristo en nuestros corazones comienza una transformación para moldearnos a su imagen y semejanza.  Entramos en un proceso de confrontación en contra de todos aquellos hábitos que nos destruyen como personas, no agradan a Dios, nos alejan de Él, y nos apartan de su propósito en nuestras vidas.

Es necesario entender que este cambio no es “automático” o “al instante”.  El proceso de transformación a nueva criatura es gradual y constante.  Requiere tiempo despojarnos de nosotros mismos para entregarnos a Cristo y el proceso es diferente en cada persona.  Es necesario un corazón dispuesto y esforzamos en soltar el control de nuestra vida para dárselo al Señor.

Debemos estar conscientes de que NO ES TAREA SENCILLA y solo con la ayuda del Espíritu Santo podemos lograrlo.  Solo si nos mantenemos firmes en nuestra fe, ejercitándola por medio de la oración, el ayuno, la congregación y por supuesto el estudio de la palabra, lograremos fortalecer nuestro hombre interior por medio del Espíritu de Dios y así podremos resistir todos los ataques de Satanás quien siempre hará cualquier cosa para alejarnos de Nuestro Padre y la salvación en Cristo.

Seguir a Cristo demanda esfuerzo, compromiso y obediencia, sin embargo, las recompensas son eternas. Dios nos ha dado espiritu de poder, amor y dominio propio.  No seamos cobardes y seamos fuertes, firmes en la fe y comportémonos de acuerdo con el espiritu que Cristo nos ha dado cuando lo hemos recibido en nuestros corazones.  Él es fiel; si lo amamos y obedecemos, siempre nos acompaña en nuestros procesos. ¡Esfuérzate y se valiente que el Señor siempre te acompaña!

 Bendiciones

Gál 5:19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,

Gál 5:20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,

Gál 5:21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.

Gál 5:22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,

Gál 5:23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.

Gál 5:24 Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.

Gál 5:25 Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.

Gál 5:26 No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros.

Te invito a ver el video en el siguiente link:
 https://youtu.be/4ldx2eLyJzQ
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